La influencia que está teniendo en los últimos años la moda nórdica es más que evidente. Desde el posicionamiento de la semana de la moda de Copenhague gracias a un street style de lo más potente y a un factor diferenciador más que marcado, hasta el minimalismo sueco o el compromiso con la sostenibilidad han hecho que las firmas de los países escandinavos estén en el punto de mira de todos los amantes de la moda.
Entre todas ellas, hay una que ha logrado posicionarse como una de las firmas sostenibles de referencia, se trata de House of Dagmar. Esta etiqueta sueca, fundada en 2005 por tres hermanas que se propusieron crear una firma de moda realmente sostenible y con bajo impacto medioambiental. Sus tejidos han revolucionado el panorama incluso desde antes de nacer la firma. En 2008 crearon lo que bautizaron como lana mulesing-free, es decir, un tipo de lana en el que las ovejas no sufrían el esquilado. Posteriormente, han seguido buscando nuevas fórmulas para evitar el sufrimiento animal en sus prendas buscando técnicas como el cruelty-free shearling, que tiene como objetivo obtener seda de una manera responsable.
Pero, más allá de su labor con respecto a los animales, el planeta y la ética laboral, los diseños de House of Dagmar por sí solos ya son dignos de elevar la firma a la categoría de culto. La marca sueca opta por crear básicos atemporales, de alta calidad y con un punto de tendencia. En sus pocos años de vida, ya ha logrado desfilar durante la semana de la moda de Estocolmo y se ha hecho con varios galardones que premian sus diseños.
Un éxito en Instagram
Uno de los principales canales en dar visibilidad a esta firma ha sido Instagram. Tanto nórdicas como fashionistas de todo el mundo lucen sin parar sus looks con prendas de la firma, demostrando que la sostenibilidad y la ética que dan forma a la firma no están reñidas con el diseño actual de sus prendas.
Más sobre la firma
Según explican sus tres fundadoras, cuando House of Dagmar nació en 2005, tenían «el deseo de establecer un negocio duradero basado en un enfoque de alta calidad», ya que la alta calidad contribuye a una vida útil más larga para la ropa, que en última instancia es mejor para el medio ambiente. A lo largo de los años se han formado sobre fibras y métodos de producción, mejorando los propios cada vez más y eligiendo materiales y diseños duraderos y respetuosos con la tierra. Este camino ha hecho que acumulen galardones de diseño como el Guldknappen (el premio más importante de diseño de escandinavia), el premio a diseñador del año de la edición sueca de la revista Elle o fresh faces award de Nueva York.
Las prendas de la firma pueden adquirirse a través de su web y tienen un precio medio de 300 euros.
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