Hasta donde me llega la memoria, en las colecciones de la francesa Isabel Marant siempre ha habido monos de trabajo. La diseñadora no deja pasar la ocasión para incluir esta pieza en sus propuestas, indistintamente a que se orienten a ser cubiertas con abrigos de paño o complementarse con sandalias de tiras; el mono no falla jamás. No habrá en la tierra editora de moda que no haya suspirado por él, ya sea ante un escaparate o ante una instantánea de pasarela, ni tienda que no haya replicado la fórmula: pantalones de perneras holgadas y parte superior tipo camisa, también ligeramente ancha. Ha sido declinado en mil y una versiones – verde militar, denim desteñido, blanco roto… – sin ser infieles a la versión original pero a Zara ha llegado la que se antoja definitiva, al menos para lo que a este 2020 atañe.
© Cortesía de Zara
Mono denim. Comprar.
A la vista está que cumple las expectativas y que es capaz de vertebrar el más chiflante estilismo de la temporada sin otro complemento más que unas sandalias – negras y de tacón fino según los estilistas de la marca gallega -, un turbante y un bronceado bonito.
© Cortesía de Zara
Mono denim. Comprar.
La moda reside en prendas sencillas y la tendencia en el empeño de una creadora prodigiosa que ha convencido hasta a la más titánica de las tiendas de la industria – Zara – de que el mono worker debería estar en todo armario femenino.
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