Hay quienes solamente compran en Zara por ella, quienes cuentan los días que faltan para su lanzamiento, quienes coleccionan sus diseños desde el primer drop, quienes no le pillan el punto, quienes son incapaces de pronunciar su nombre y quienes no la ubican en el universo sofisticado de Zara. Las opiniones sobre la línea SRPLS de la marca gallega son dispares y numerosas, lo que evidencia una verdad como un templo: no deja a nadie indiferente. Esta colección, que vio la luz por primera vez en otoño de 2018, domina hoy la conversación en Zara con su cuarta entrega, una línea de prendas que mantiene la esencia SRPLS – es decir, la estética miliciana y todas las siluetas y colores que esta implica – pero fijándose en lo náutico.
© Cortesía de Zara
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"Esta nueva edición se inspira en músicos, actores y activistas. En las prendas, realizadas con materias primas de alta calidad, predominan el color marino y caqui en los uniformes, que han formado durante décadas parte del lenguaje visual de la disconformidad. Se conforma así un lienzo en blanco para un estilo propio e individual", argumenta la firma a tenor de lo nuevo de SRPLS. En esa descripción es interesante poner el foco en la última frase, la cual denota por qué esta colección tiene tanto éxito: se adapta a cualquier armario. Y es que en sus filas siempre encontraremos un abrigo de doble botonadura que nos solucione el invierno, un mono de trabajo que rompa la monotonía de nuestro uniforme laboral, un pantalón cargo que sustituya momentáneamente los pitillos.
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En lo que a este cuarto drop respecta, podemos encontrar camisetas y jerséis de inspiración náutica – rayas marineras, detalles con nudos -, faldas tableadas de largo midi, botines acordonados con tacón todoterreno, sandalias tipo TEva de suela track, vestidos camiseros y pantalones cargo llenos de bolsillos y cremalleras. Todas estas son prendas que, seguro, llevará Marta Ortega dentro de poco y muy probablemente tú también.
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Desde aquí casi puede oirse la palabra que retumba en vuestros pensamientos: otoño. Y sí, no hay forma alguna de esquivar la evidencia: esta es una línea de ropa pensada para cuando el calor afloje y los planes de nuestra agenda exijan prendas de abrigo. Pero, ¿acaso hay algo malo en anticiparse?
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