Lo estábamos deseando. Necesitábamos ya que unos grandes premios nos devolvieran en cierto modo la normalidad de la alfombra roja y esa ha sido la 93ª edición de los Premios Oscar 2021 (eso sí, los looks de las famosas nos dejaron una red carpet sin mascarillas, pero tampoco glamour) –aunque Margot Robbie y su look de belleza nos parece un acierto total-. Pero más allá de los detalles de estilo más sorprendentes, queremos repasar contigo los momentazos de la noche. ¿Empezamos?
Glenn Close, la reina indiscutible de la noche
Las redes se han volcado con ella a lo largo de toda la gala. Una y otra vez, la actriz perdía en todas las nominaciones que la Academia le había concedido y los tuiteros enloquecían y protestaban: ¿cómo es posible que no gane? –repetían una y otra vez.
Pero no ha sido el único momento que ha protagonizado. Yuh-Jung Youn –mejor actriz de reparto en los Óscar 2021 por Minari- le dedicó unas palabras de admiración. Aunque, eso sí, nada como cuando se emocionó casi más por recoger el Oscar de manos de Brad Pitt que por la estatuilla en sí y las redes gritaron a coro: “Todos somos Yuh-Jung Youn”.
Por cierto, que la corena que ha ganado el Oscar a los 73 es una de las historias más inspiradores de la noche y es que la actriz se dedicó a su sueño cuando muchos piensan que es demasiado tarde (fue migrante, madre y por último actriz). Es, sin duda una de las grandes protagonistas de la noche.
La gala nos ha dejado un sabor de boca regulero y un poquito de bajón. Nicole Kidman, una de las actrices que con más frecuencia se ha colado en las mejor vestidas se ha plantado en su casa a ver los Oscars en vaqueros, camiseta (de encajito, eso sí) y moño revuelto.
¿Y qué es eso de vestirse de estatuilla para la gran ceremonia de los Premios de la Academia? No han sido una, ni dos, ni tres… hay unos cuantos.
Al menos su Valentino –muy en la línea que hemos visto en esta alfombra, oda abosluta al crop top- nos encanta. Nada que ver con el horror que ha llevado el músico y escritor Questlove en los pies. ¿Pero eso qué es?
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Aunque no es oro todo lo que reluce. La noche también nos ha dejado grandes vestidazos y momentos. ¿Sabías que el increíble Louis Vuitton de Regina King lleva 62.000 lentejuelas, 3900 cristales y 140 horas de trabajo.
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Y el Armani de Amanda Seyfried (de los más bonitos de la noche) tiene historia detrás: cuando vio el vestido rojo se enamoró al instante, la actriz pensaba que el color era perfecto para contrastar con el blanco y negro de Mank –la película por la que ha estado nominada a mejor actriz de reparto-.
El diseño está inspirado en una flor, casi como si fuera un pétalo al revés. Desde la firma han explicado que querían destacar la personalidad de la actriz con este vestido, que es una manera de darle forma a la pasión.
Por cierto, nos han chivado que el vestido de Zendaya –cuyo pelo de sirena ondeante al viento ha conquistado los feeds de la noche- brilla en la oscuridad.
¡Ah! Y nos quedamos con la #AlfombrillaRoja de Movistar que ha conseguido poner un poquito de glamour y chispa en las casas de espectadores y profesionales (y en las redes, por supuesto).
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Prepara el pañuelo, que viene lagrimilla
El momento del nudo en la garganta ha venido de la mano de Thomas Vinterberg, director de Otra ronda. Cuando ha recogido el premio a Mejor película extranjera, ha recordado la tragedia con la que empezó la producción: solo dos semanas antes de que empezara el rodaje su hija Ida, de 19 años, murió en un accidente de coche.
Otro de los momentos más emotivos lo protagonizó la directora china Chloé Zhao, quien se ha convertido en la primera mujer asiática y segunda mujer en ganar el Oscar a la mejor dirección. Al recoger la estatuilla por Nomadland dijo: “Aférrense a la bondad que hay dentro de ustedes mismos y en los demás”. Pura inspiración.
Y si hay un momento que tiene que estar en esta recopilación por los suspiros, la envidia (sana) y el enternecimiento patrio y mundial es este:
Todos somos Yuh-Jung Youn cuando conoce a Brad Pitt. Pero muchas han querido ser esta noche la mujer de Riz Ahmed mientras él le colocaba bien el pelo ante los fotógrafos. Lo que no querríamos es vernos en el papelón de la madre de Daniel Kaaluya cuando su hijo ha explicado… lo que no hacía falta explicar. ¡Ver para creer
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