Nueva York se ha convertido en la gran pasarela de Marc Jacobs. En la presentación de su colección otoño-invierno 2021-2022 ha recurrido a dos emblemas de Manhattan: la Biblioteca Pública de Nueva York y la tienda Bergdorf Goodman. Ha supuesto el regreso de los desfiles presenciales a la ciudad, y lo ha hecho por todo lo alto. Las modelos han desfilado entre los suntuosos mármoles de la Biblioteca Pública de Nueva York, pero el desfile se ha proyectado de manera simultánea en la fachada de Bergdorf Goodman. Serán ellos quienes vendan de manera exclusiva la colección el próximo otoño, según ha adelantado WWD.
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“Como neoyorquino nacido y criado, Bergdorf Goodman siempre ha sido y sigue siendo un faro de aspiración, servicio y calidad”, ha publicado Marc Jacobs en su perfil de Instagram. “Desde mis primeros recuerdos cuando era niño con sus escaparates creativos, fantásticos y atrevidos hasta su firme compromiso con las colecciones de Marc Jacobs (que comenzaron a mediados de la década de 1990, después de mi salida de Perry Ellis), he reverenciado durante mucho tiempo el nombre de Bergdorf Goodman como la cumbre de la mejor experiencia en tienda”.
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El título de esta colección es ‘Happiness’: una apuesta por la felicidad en tiempos difíciles. Lo ha transmitido a través de un profuso empleo de los colores brillantes, huyendo de los estampados imperantes en la actualidad para recurrir a los color block en colores como el amarillo, el rojo o el turquesa. Las lentejuelas de gran tamaño, tanto en tonos fríos como cálidos, también han tenido un gran protagonismo. Entre los volúmenes destacan los largos XXL, los pantalones con bajos infinitos, las plataformas y las figuras oversize, que adquieren su máxima expresión en los plumíferos. La sensación de conjunto abigarrado se ve nutrida por un juego de superposiciones en el que se mezclan más las texturas que los colores. La colección cuenta también con prendas inspiradas en el op-art, con rayas en blanco y negro, en una clara referencia a los felices años 60.
El desfile, el primero del diseñador estadounidense desde febrero de 2020, ha contado con la presencia de nombres como el de Kaia Gerber o Gigi Hadid. Una puesta en escena por todo lo alto para alimentar las ansias de felicidad y de estallido cromático de un mundo gris tocado por la pandemia.
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