Que en la moda todo vuelve es un hecho contrastado, y el último ejemplo lo encontramos en los pantalones campana que Carolina de Mónaco lució con 15 años y podría volver a llevar ahora que ha cumplido 66.
Cuando la royal todavía era una adolescente, Ranieri y Grace de Mónaco decidieron darle permiso para su primera sesión de fotos y una entrevista exclusiva. Así llegaron una serie de tomas de la princesa sonriente y un poco avergonzada, como ocurre en toda primera vez. Su lenguaje corporal, sentada en el pequeño salón del Palacio de los Príncipes donde había sido recibida la periodista, comunicaba una vaga sensación de cierre y la joven Grimaldi intentaba relajarse un poco acariciando al perro de la familia mientras respondía a las preguntas, con su madre vigilando de cerca. Luego se familiarizó con el objetivo y, al salir al balcón, se sintió más cómoda.
Se dice que la web no olvida, pues nada de lo que se ha publicado en internet puede desaparecer del todo. Sin embargo no ocurre lo mismo con las imágenes de la era analógica, por lo que se vuelven más preciadas y difíciles de encontrar. Así que es un hito cada vez que alguien recupera una y la escanea para transportarlas a lo digital y hacerlas eternas. Esto mismo ocurrió con algunas de las imágenes de la primera entrevista de Carolina de Mónaco.
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Era diciembre de 1972 y el primer encuentro de la Princesa Carolina de Mónaco con la prensa se lo ganó Paris Match. El fotógrafo Jean-Claude Deutsch, en exclusiva para la revista, le hizo infinidad de fotos pues, por primera vez, se dio cuenta de lo guapa que era la hija de Grace Kelly. La ex actriz lució sencilla y elegante con un traje negro de tweed, medias negras transparentes y un par de Mary Jane abrochadas a su lado.
Los pantalones campana de Carolina de Mónaco
Fue Carolina la que representó el estilo de las jóvenes de la época. Su look estaba compuesto por una blusa con estampado de pequeñas hojas y flores en varios tonos de verde, amarillo y rosa sobre un fondo marrón, un fino cinturón de cuero y un reloj de pulsera masculino, símbolo de la autonomía de género. Y, como prenda más llamativa del estilismo, unos pantalones inéditos, porque si hoy los pantalones campana son todo un revival, por aquel entonces eran la novedad absoluta. Carolina eligió un par verde salvia y los combinó con mocasines de niña buena con tacón ancho y hebilla en la parte delantera.
La larga melena suelta con raya central y la cara limpia y sin maquillaje representan el último detalle de la iconografía de los setenta menos conocidos y que supuso el pistoletazo de salida a la historia de amor entre el mundo y la princesa de Mónaco que, cincuenta años después, sigue sin desvanecerse.
Pantalón campana de Pepe Jeans
Vía: Marie Claire IT
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