Hace unas horas, la Isabel Coixet publicaba en su perfil de Instagram lo que sabía que todo el mundo le iba a preguntar: qué significaba su chaqueta. Y volvía a practicar el que es su deporte favorito: alzar su voz para reivindicar todas las causas en las que hay que poner el foco.
Y es que la directora, que compite esta noche con la película documental El techo amarillo en la categoría de Mejor documental de la 37 edición de los Premios Goya, no ha querido dejar pasar la oportunidad que le brinda el evento para ser, de nuevo, un altavoz. En este caso, a través no sólo de su documental, que se adentra en un desgarrador caso de abusos que quedó impune, sino también a través de su vestimenta.
La directora explicaba en sus redes sociales qué mensaje había detrás de su chaqueta customizada para responder a esas más de 100 veces a todas las personas que le habían preguntado acerca de qué diseñador o marca iba a ir vestida. La respuesta iba mucho más allá: iba a ir vestida en forma de mensaje. De apoyo a las mujeres iraníes. De apoyo a la libertad:
«Hoy me han preguntado unas 100 veces “de quien voy a ir esta noche”. La verdad es que voy a llevar una chaqueta negra de una tienda de segunda mano ( 15 euros) , pintada por @elenza con la cara de #mashaamini y #womanlifefreedom», comenzaba explicando.
Y añadía que sabía que «women» no era lo correcto (el hashtag es con la palabra «woman») pero que «en la vida hay que abrazar los errores y además me gusta eso de “mujeres”.
https://www.instagram.com/p/CohzxAkMEj_
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Terminaba su publicación, en la que muestra la chaqueta en un primer plano que no dudó en mostrar a los fotógrafos en la alfombra azul de la fiesta del cine español, con otro mensaje igual de rotundo: «Y llevo una chaqueta de segunda mano para que no se nos olvide que lo importante no es la alfombra roja, la ropa, las marcas, el “glamour”, el maquillaje, la fanfarria: lo importante es lo que hacemos , lo que se proyecta en una pantalla. Lo demás…al que le guste estupendo, y al que no, no pasa nada. No nos creemos obligaciones superfluas ni mas presiones que las que hay. Relajémonos un poquito. O mucho.»
Acompañaba su look con un bolso icónico: el modelo Kusama de Louis Vuitton, la segunda colaboración de la firma con la prestigiosa artista japonesa Yayoi Kusama. El estampado, Infinity Dots.
No ha sido la única que ha utilizado su presencia y su imagen para lanzar un mensaje de reivindicación. Algunas como Sara Sálamo también aprovechaban la ocasión para hacerlo. Sálamo, en su caso, a través de su rostro lavado, para reivindicar la belleza natural y la aceptación de una misma, sin filtros.
Nos duelen las manos de aplaudir.
Vía: ELLE ES
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