Para un cantante, ofrecer un concierto ante sus seguidores es el pan de cada día, pero también es una exposición a pecho descubierto ante ellos. Y al final, lo bueno y lo malo acaba quedando a la vista.
Y al descubierto quedó hace unos días Paulina Rubio, cuando ofreció un concierto en Tenerife con motivo de Carnaval. Aunque la mexicana salió al escenario con mucha energía para cantar tres de sus temas más conocidos, rápidamente el público asistente se desencantó. El playback le jugó una mala pasada, dejando en evidencia una voz desafinada e innumerables gallos, tal y como recogieron las redes sociales.
Pero la mexicana no ha sido la única que ha tenido que enfrentarse a sonados patinazos. Más que conocido es el gusto deBritney Spears por el playback, y durante muchos años se le ha criticado su uso. Sus fans (y no tan fans) se revelaron hasta tal punto que en 2017 Britney dedicó una canción a capella a todos sus críticos. Aunque en esta ocasión demostró sus dotes musicales, lo cierto es que sigue utilizando esta técnica en sus conciertos…
Y lo mismo hace Madonna. La reina del pop hace oídos sordos a quienes, pagando un precio alto por entradas a sus conciertos, critican que no sea ella quien canta en directo. Aunque hay que reconocer que la artista se deja la piel en el escenario, sus playbacks han hecho que muchos aseguren que la ambición rubia, ya no tiene la voz de antes y tapa sus limitaciones con el ‘playback’.
Y si Madona puede haber perdido calidad en la voz, algunas nunca lo tuvieron. Como es el caso de Lindsay Lohan, quien aseguró hace bastantes años que la música era su pasión. La actriz probó suerte en esto de la canción… y el patinazo fue sonado: no solo hacía playback, además, era incapaz de recordar la letra de las canciones, cosa que el público no perdonó.
No así ocurrió con Katy Perry, que lo que descubrió `el engaño´ fue una flauta. Durante un concierto en 2011, la cantante quiso ponerse la medalla de saber tocar este instrumento. Con lo que no contaba era que ella iba a dejar de tocar… y la flauta iba a seguir emitiendo sonido. Eso sí, en esta ocasión, sus fans se lo tomaron a risa y ella supo encajar el fallo con una sonrisa a modo de disculpa.
Otros famosos han tenido peor suerte. En octubre de 2013, durante un concierto en Virginia, Selena Gomez vio cómo su voz seguía sonando mientras ella tropezaba y se caía en medio del escenario, grito de por medio. Con tan mala suerte que la actuación era grabada y colgada en YouTube para la posteridad.
Pero si hay alguien a quien parece no importarle nada mostrar sus fallos sobre un escenario, es Mariah Carey. La reina de los villancicos ha tenido numerosos patinazos con el playback, de los que no ha sabido salir muy airosa… y lo mismo le ha dado.
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