La figura de Anabel Pantoja, que en muchas ocasiones ha tenido que ejercer de mediadora en conflictos familiares, ha ganado en presencia en los últimos años, con su trabajo como colaboradora en ‘Sálvame’. Una tarea con la que no todos los miembros del clan de Cantora estarían de acuerdo, pero que, con el paso del tiempo, han aceptado. Incluso, alguno, aunque de diferente forma, se ha apuntado a esa manera de vivir.
Anabel, a la que algunos compañeros atizan de manera recurrente, se ha ganado el cariño de la audiencia por su naturalidad, la llanura con la que expone las cosas y la transparencia con la que afronta los temas. No solo eso, sino que se ha convertido en una auténtica ‘influencer’ gracias a la conjunción de lo que vemos en pantalla y lo que muestra en una cuenta de Instagram que no ha parado de cosechar ‘followers’ desde que empezara este confinamiento.
Sí, ella adquirió el compromiso con esa gente que la sigue de mantener el listón del entretenimiento alto. No ha defraudado. Hasta el punto que, hace unos días, superaba la barrera del millón de seguidores y, como agradecimiento y siguiendo la línea de la que hablábamos, de ofrecer lo mejor de sí misma a ese público fiel, se mostraba completamente desnuda. Porque así es Anabel.
La sobrina de Isabel Pantoja ha recreado imágenes de su tía y de la mismísima Kim Kardashian. Ha cantado por Whitney Houston. Se ha enganchado a Tik Tok junto a su pareja, Omar Sánchez. También ha confesado sus miedos después de padecer ciertos síntomas sospechosos de coronavirus. Y aún le ha quedado tiempo para cumplir, con videollamadas con la audiencia de ‘Sálvame’.
Lo ha hecho alejada de su familia. Y todos sabemos lo familiares que son los Pantoja… También, después de haber tenido que posponer su boda«hasta cuando se pueda», superando todo tipo de barreras y de inconvenientes para cancelar lo que ya tenía listo para su gran día. Poniéndose por bandera un sentido del humor que ha potenciado para ponerlo al servicio de quienes siguen sus pasos como un bálsamo contra el sopor que supone, en muchos momentos del día, estar entre las mismas cuatro paredes desde hace más de un mes.
¿Es o no es para amar a Anabel Pantoja?
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