Aceite de oliva virgen extra, el antioxidante contra el sol

El Aceite de Oliva Virgen Extra es uno de los ingredientes principales de la dieta mediterránea, o lo que es lo mismo, la nuestra. Así que, si llevamos a rajatabla este tipo de dieta, estamos de suerte. Y es que, si el aceite de oliva ya tenía beneficios para la piel y el pelo en sí, el Aceite de Oliva Virgen Extra lo supera con creces. Especialmente ahora que llega el verano y el sol está más presente e intenso que nunca, porque se convierte en la principal defensa de la piel ante él.

Beneficios del Aceite de Oliva Virgen Extra

El Aceite de Oliva Virgen Extra es un potente antioxidante por todas las vitaminas que contiene pero, además, ayuda al organismo en muchos sentidos y a la piel en muchos más.

Antioxidante y anti-age

El AOVE, como también se le conoce, aporta vitaminas muy variadas que tienen esta función, entre ellas, la vitamina A, que incremente la regeneración celular, reduce líneas de expresión, arrugas e imperfecciones, mejora el tono y la textura de la piel; la vitamina E, que hidrata, la protege de los radicales libres, ayuda a la producción del colágeno y estimula la elasticidad. Además, ayuda a paliar los daños del sol en la piel.

También aporta vitamina K y vitamina D, que es esencial para la mineralización de los huesos, ya que ayuda a la absorción de calcio y fósforo.

A estas vitaminas hay que sumar los polifenoles, antioxidantes muy potentes que combaten los radicales libres. Entre ellos están la Oleuropeína, que actúa directamente sobre la piel, destruyendo los radicales libres causados por los rayos UV y la contaminación ambiental, lo que ayuda a frenar los signos del envejecimiento como arrugas, flacidez y manchas.

Beneficios para el resto del organismo

El resto de los polifenoles tienen sobre todo beneficios para el resto del organismo. En este sentido, el Hidroxitirosol contribuye a un envejecimiento saludable a gracias a su efecto cardioprotector protegiendo los vasos sanguíneos y arterias. La Oleocantal sirve para los dolores articulares y musculares, ya que ejerce un papel antiinflamatorio y analgésico. El Ácido Oleanólico ayuda a prevenir daños en el hígado y activa la circulación sanguínea regulando las grasas de la sangre y reduce la inflamación.

Por último, la Quercetina ayuda a frenar el envejecimiento celular, disminuye la presión arterial y mejora la salud del corazón. Además, favorece la nutrición del cabello desde el interior, fortaleciéndolo y aportando densidad y luchando contra la caspa.




Fuente: Leer Artículo Completo