La belleza se toma muy en serio el futuro del planeta. Y, aunque no es obligatorio (pero sí recomendado por la Agencia Europea de Productos Químicos), desde 2018, el sector ha eliminado de manera voluntaria el 97,6% de las microesferas plásticas en todos productos. Lo asegura Stanpa, la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética en un informe que acaba de presentar. Fruto de este compromiso han desaparecido, entre otros, los exfoliantes con bolitas que han sido sustituidas por fórmulas sostenibles con semillas o compuestos minerales u otros ingredientes no plásticos; la eliminación de pastas de dientes y productos como los exfoliantes corporales, que llevaban también a veces microesferas plásticas y que han sido reemplazadas por otros compuestos, generalmente, de origen natural.
La crisis de los plásticos: los botes suman
Ocho millones de toneladas de plásticos van a parar a los mares cada año. A este paso, en 2050 habrá más que peces en los océanos. Y sus efectos son catastróficos. Pero la industria de la belleza consume 120.000 millones de botes al año. Las microesferas de este material presentes en exfoliantes y dentífricos también ponen en peligro la superviviencia de muchas especies marinas. Ya están prohibidas en EE.UU., Reino Unido, Canadá y Nueva Zelanda. La UE los vetará en 2021, junto a todos los plásticos de un solo uso, como los bastoncillos de algodón, igual de letales para la fauna marina.
Reciclaje en entredicho: la culpa es tuya
En la cocina haces los deberes y cada tipo de desecho va donde le corresponde, pero en el baño te olvidas. Lo sabemos porque un estudio de Recycle Nowdemuestra que las personas que reciclan el 90% en sus cocinas lo hacen tan solo en un 42% en sus baños. Toma nota y evita que tus desperdicios beauty (bastoncillos, discos de maquillaje…) acaben en el váter. Y acuérdate de desmontar los botes: el plástico va a la basura amarilla, y las cajas de cartón y el cristal, a sus puntos habituales de reciclaje.
Oceános amenazados: el coral también importa
No solo los microplásticos, las toallitas desechables (más de 10.000 millones gastamos cada año), los bastoncillos (13.200 millones consumimos) o las cajas de cartón de tus cremas (producen la deforestación de 73.000 km cuadrados de selva anual) amenazan el futuro del planeta. Hay otro elemento en tu neceser que hademostrado ser el culpable directo de la erosión extrema de las barreras de coral del océano Pacífico. La oxibenzona y el octonoxate, dos de los filtros solares más habituales, tienen un efecto devastador sobre este ser vivo: hacen que pierda su color rojo y retrasan su crecimiento. Y hasta 14.000 toneladas de protector solar acaban en los arrecifes cada año.
¿Qué puedes hacer?
1. PACKAGING RECICLADO: Garnier lo ha impuesto al 100% en su nueva gama Bio, que usa plástico y papel reciclado y reciclable. Igual que The Body Shop, que además se centra en ayudar a los recolectores de plásticos del Tercer Mundo y se propone recoger 900 toneladas en tres años. Shiseido usa cartón reutilizado en su línea Waso.
2. ABEJAS PROTEGIDAS: Son insignia de la maison Guerlain, que además usa los activos de sus extractos en varias de sus líneas. Y se ha comprometido al 100% con la supervivencia de la abeja negra de la isla de Ouessant y ha formado un convenio con la UNESCO para programa de entrenamiento de apicultores. Nuxe, por su parte, apoya al Museo del Louvre, que ha colocado colmenas en el prado de flores en su jardín Raffet, abierto al público el año pasado.
3. COMPROMISO CON LOS OCÉANOS: Del plankton acuático saca Biotherm los grandes beneficios de sus cosméticos. Y el 8 de junio su programa Water Lovers tradicionalmente va a desplegaba voluntarios para limpiar de plásticos y basura 10 playas españolas. Este año, debido a las condiciones dle estado de alarma, no va a poder ser. Pero desde 2012, el programa Water Lovers de Biotherm ha trabajado en la concienciación sobre la conservación de los océanos y sobre la amenaza que supone la contaminación por plástico para el consumidor. .
4. BOSQUES Y MARES: Caudalie devuelve al campo lo que es del campo con sus aportaciones a la red 1% for the Planet: a través de ellos dona el 1% de su volumen de facturación mundial a asociaciones protectoras del medio ambiente (más de 10 millones de euros). Para luchar contra la deforestación (han plantado 8 millones de árboles), pero también a favor del ecosistema marino.
5. RECARGA Y AHORRA: No solo te sale más barato (hasta un 35% menos) reutilizar los frascos de cristal recargables de los perfumes de Thierry Mugler (la firma es pionera en el reciclaje desde 1992, con sus fuentes de fragancias para rellenar que puedes encontrar, entre otros puntos, en El Corte Inglés). Con ellos reduces la huella de carbono y la producción de cristal, cartón y plástico.
6. GASTO AL MÍNIMO: Además de proteger especies vegetales en peligro, en Yves Rocher han aplicado el ingenio para crear productos de mínimo impacto. Sus geles de ducha concentrados (y biodegradables) contienen en 100 ml el equivalente al poder y duración de uno de 400 ml. Pero reducen el uso de plásticos en un 50% con una base lavante sin etoxilatos.
7. PROCESO IMPECABLE: En Davines priorizan el uso de ingredientes eco-certificados para asegurar que se respetan los principios éticos en todas las fases del proceso de producción. Y esta se planifica siempre con la temperatura necesaria, la máxima reducción de agua y la utilización de energías renovables. En Rituals usan tapones de madera y sus botes de crema son recargables.
8. ACCIONES CONCRETAS: En Klorane cultivan ellos mismos el 25% de las plantas que usan y garantizan el 100% de la trazabilidad de sus activos vegetales. Su relación con los productores es directa y los ingredientes se compran por comercio justo. Además, su fábrica convierte sus desechos en energía con una caldera de biomasa y han reducido su huella de carbono en 1.600 toneladas al año.
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