Charlene Wittstock, más conocida como Charlene de Mónano, ha reaparecido en público con un nuevo rostro que deja ver que se ha sometido nuevamente a varios retoques estéticos. La princesa de Mónaco acaba de cumplir 42 años y ha decidido desafiar el tiempo con un rejuvenecimiento total de rostro.
Toda la Familia Real de Mónaco ha presidido una de las grandes celebraciones del Principado, el Día Santa Devota, una tradición muy querida que cumple con un antiguo ritual. A la festividad acudieron también los pequeños mellizos Jacques y Gabriella que como es lógico, acapararon todas las miradas. Charlene no se quedó atrás, la princesa ha llamado la atención de los medios por unos ligeros retoques estéticos.
Durante la celebración los medios se han fijado en que la princesa lucía un rostro más redondo, los labios más voluminosos, la piel más tersa y brillante. Una rinoplastia, rellenos de ácido hialurónico, bótox son algunos de los cambios que Charlene se ha sometido.
Deteniéndonos en su estilismo, la princesa ha elegido dos looks bastantes similares entre ellos. El primero se trataba de, mayormente un abrigo por debajo de la rodilla de color azul noche. Charlene lo ha combinado con un cinturón negro y botas altas de cuero, muy en tendencia. El segundo look estaba compuesto por un dos piezas de traje de chaqueta azul marino, pero con falda plisada de las mismas tonalidades. Uno de los detalles del look ha sido el pañuelo anudado al cuello.
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