Los conjuntos deportivos de Jennifer López son infinitos. La cantante, asidua a ejercitar su físico y a mantener su bienestar, comparte con frecuencia en su perfil de Instagram muchos de los looks sport de su armario. Y nunca dejan indiferente.
Ayer mismo, la cantante no dudó en enseñar en una selfie en el espejo uno de los más llamativos, coloridos y, también infantiles de todo su vestuario. Se trataba de una combinación de top rosa con unos divertidos leggins estampados con un dibujo de un paisaje del cielo con sobre el que vuelan paracaídas. Casualidad o no, se puede observar un arcoiris de fondo.
Los leggins que la cantante ha mostrado en esta fotografía son los más divertidos que ha lucido hasta el momento y pertenecen a la firma NiyamaSol, una marca que fabrica sus diseños con botellas de plástico recicladas.
Entre las propuestas de Niyama Sol, se pueden encontrar leggins bañados en flores, con estampados de animales, básicos, degradados… Todo lo que imaginas está disponible en su página web. Pero que Jennifer López haya elegido esta firma para hacer ejercicio no es casualidad ya que la cantante ha creado una colección junto a Niyama Sol (JLo x Niyama Sol) y ha lucido en varias ocasiones sus diseños.
Con un precio que oscila entre los 40 y 80 euros, los tejidos con los que se han fabricado permiten máxima libertad de movimiento, ligereza absoluta, son antibacterianos y están diseñados para redistribuir la humedad en su silueta hasta evaporarla. Una apuesta deportiva que más allá de sus características internas también es atractiva visualmente. La originalidad de sus estampados la ha posicionado entre las favoritas para las más atrevidas y su forma, consigue realzar la figura alzando los glúteos.
Desde la propia firma confiesan haber sido creados para mujeres que luchan en su día a día por sentirse mejor: «Las que están haciendo el trabajo. Las que están comprometidas a convertirse en las mejores versiones de sí mismas mientras se divierten más en el proceso. Las que están rompiendo techos de vidrio y reparando sus propias heridas». Así es Niyama Sol.
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