Fue un homenaje de Estado. Un día para el recuerdo. Una tarde de un día, el 11 de marzo, con un sol tibio en Madrid. Ya de primavera. Los Reyes presidieron elacto con motivo del Día europeo del Recuerdo para las Víctimas del Terrorismo, para mostrar el apoyo y solidaridad con los fallecidos y sus familias. A las 16.00 horas dio comienzo la solemne ceremonia en los jardines del Palacio Real. La fachada oeste del Palacio sirvió de fondo para una imagen de unión y de recuerdo. Una fecha en la que se cumplían 17 años delterrible atentado de la capital. 193 fallecidos. Más de 2.000 personas heridas.
Los Reyes fueron recibidos por el presidente Pedro Sánchez. Llegaron del brazo y tomaron asiento frente a un pequeño escenario dispuesto frente a las sillas de las autoridades. A la derecha de Felipe VI se sentó Sánchez y a la izquierda de doña Letizia,Tomás Caballero, presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo. La conductora de la ceremonia, Pepa Bueno, dio paso a los himnos, interpretados por la Orquesta de Nacional de España. “Las cicatrices son las costuras de la memoria”, comenzó Pepa citando versos de la colombiana Piedad Bonnett.
Fue un acto muy medido por el duelo del día. El color negro reinó entre los asistentes. Doña Letizia optó por un discretísimo abrigo negro con detalles de botones joya de Carolina Herrera y maxi botas negras de Steve Madden.
También de negro, Pilar Llop, presidenta del Senado, e Inés Arrimadas, presidenta de Ciudadanos, que vivía un día convulso tras la destitución del vicepresidente Ignacio Aguado en la Comunidad de Madrid. Optaron por el luto blanco Carmen Calvo, vicepresidenta primera, y Yolanda Díaz, ministra de Trabajo (para mí, iba perfecta).La presidenta del Congreso, Meritxell Batet,y la ministra Irene Montero se decantaron por el azul tinta. Rompieron con el tono reinante la ministra Teresa Ribero, con una llamativa chaqueta roja (que no entendí muy bien); y Margarita Robles, que escogió una chaqueta azul petróleoy una pañoleta con un print de grafitti (que no es para mí).
Una de las más buscadas, la presidenta de la Comunidad de Madrid. Isabel Diaz Ayuso escogió un vestido rojo midi y un abrigo largo negro. En mi opinión, este look bicolor de la presidenta no estaba conseguido. La presidenta madrileña despidió un miércoles 10 muy difícil, tras anunciar la convocatoria de elecciones el 4 mayo para evitar una moción de censura, que finalmente presentaron contra ella PSOE y Más Madrid. Al embrollo jurídico de la capital se sumaron dos mociones de censura contra el PP: en Murcia y en Castilla y León.
Emocionante encontré ese momento de música y danza que nos brindó el bailarín y coreógrafo Rubén Olmo, director del Ballet Nacional de España. Bailó “Resurgir del Ave Fénix”. La música, “Amorosa”, era del compositor vasco Jesús Guridi.
Después, tomó la palabra el Rey, que puso en relieve “la dimensión cívica de la educación como vía para fortalecer los mejores valores democráticos.” Y concluyó señalando que “preservar la memoria de las víctimas del terrorismo merece el más firme compromiso de todos los demócratas”.
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