Olga Moreno no está pasando su mejor momento, y es que el confinamiento provocado por la crisis del coronavirus le ha pillado sola con sus hijos. Desde que se decretara el Estado de Alarma, su pareja, Antonio David Flores, ha tenido que quedarse por trabajo en Madrid, y ambos llevan sin verse en persona desde entonces, y mientras él se ha visto compartiendo piso con Gloria Camila Ortega en la capital, ella se ha reorganizado la vida casi como madre soltera en Málaga: «Estoy jugando con los niños, que si los estudios, que si la casa… Así que nada, estoy como todo el mundo: esperando a que termine«, ha confesado recientemente, aunque ha querido hacerse la dura: «Lo llevo bien, sinceramente. Se hace doble trabajo y ya está».
Sin embargo, más de 40 días separados, y con dos niños, ya pesan, y ha confesado que le echa «muchísimo de menos»: «Los niños necesitan a su padre. Son muy ‘padreros'», a apuntado la empresaria que, por otro lado, está en casa sin trabajar al haber tenido que cerrar su tienda.
A pesar de todo, ahora su hija, Lola (de 7 años) ya puede salir a la calle para airearse una hora al día acompañada por ella, y eso ha conseguido ‘descongestionar’ las tensiones del día a día, así que ahora no puede evitar preocuparse por Antonio David: «No puede venir, él se tiene que quedar allí. Está trabajando y no puede venir para Málaga, pero vamos, como todo el mundo, no puede moverse. Esta ahí con la poca ropa que tiene, pero bueno», ha confesado, y es que el colaborador ni ha podido salir a comprar nada ni tampoco su mujer le ha enviado más prendas: «Hacía el programa más días y entonces sí que es verdad llevaba más ropa últimamente, pero claro no para tanto tiempo…», se ha lamentado, así que Antonio David ha tenido que ir jugando a los estilistas cada día para ir cambiando… aunque menos mal que tiene la ayuda de Gloria Camila, toda una experta en moda.
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