Patricia Pardo ha mostrado su lado más sensible y humano. Desde que se supo la desaparición de las niñas, Ana y Olivia, de Candelaria (Tenerife) junto a su padre, la presentadora ha estado muy involucrada en el caso. Han pasado ya 17 días desde que comenzó este secuestro parental y las emociones están a flor de piel.
Este 14 de mayo es el cumpleaños de Beatriz, madre de las niñas, y Patricia –que ha tomado las riendas de la sección de sucesos de ‘El programa de AR’ en sustitución de Ana Rosa Quintana– ha mostrado todo su apoyo con ella. El programa ha conectado en directo con Joaquín Amils, el portavoz de la familia, que ha leído un comunicado de Beatriz y ha sido cuando Patricia se ha roto. No ha podido contener las lágrimas.
«Hoy es mi cumpleaños, como regalo, pido que me ayuden a difundir los vídeo y fotos de las niñas para que pronto alguien las reconozca. No pueden imaginar que cada día que pasa la incertidumbre de no saber cómo están, la incertidumbre de saber si están bien, la rabia de que ellas tengan que sufrir esta locura cuando son dos angelitos. Angelitos como todos los niños el mundo. Todos estos sentimientos mezclados cada día lo hacen más difícil. No permitamos que estas cosas puedan suceder, tengo miedo a escribir, decir por las repercusiones Les pido de corazón que me ayuden a encontrarlas, yo nunca voy a parara porque mi vida no tendría sentido. Con la incertidumbre de saber cómo están, de saber que quieren llamarme… y puede estar en nuestras manos que sea un final feliz. No pararemos hasta encontrarlas. Vamos a demostrar que este mundo puede ser más seguro, donde no se permitan tales injusticias. Olivia y Ana, las adoro mis niñas preciosas y voy a estar fuertes por ustedes«, eran las palabras de Beatriz.
«Me rompo con esto. Pido disculpas, yo tengo también tengo dos niñas y me pongo en la piel de esa madre y la verdad, es terrible, muy triste», expresaba Patricia Pardo, sin poder contener las lágrimas.
«Todas nuestra fuerza, nuestro apoyo y cariño para Beatriz», sentenció visiblemente más recuperada.
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