El confinamiento ha pillado a muchas familias viviendo en casas pequeñas, sin buena ventilación y mal iluminadas, viviendas que han tenido que convertirse además en aulas para los niños y despachos para los adultos. En el reportaje de esta noche se investigan las condiciones en las que han vivido algunas familias y se buscarán soluciones con expertos, que explican cómo se pueden mejorar de cara al futuro.
También se ofrece el testimonio de una psicóloga que cuenta cómo ha podido afectar esta situación a los cuadros emocionales de muchos ciudadanos, ya que el encierro ha disparado los síntomas asociados a trastornos como depresión y ansiedad. Durante el programa se muestra una reconstrucción 3D de cómo debería ser una casa ideal post Covid-19, con todas las necesidades cubiertas para afrontar una pandemia, y se explica cómo pueden convertirse las ventanas en balcones en edificios que no los tengan.
En el punto de mira se desplaza a Huelva
Por otra parte, la pandemia ha hecho plantearse a muchas familias su lugar habitual de residencia y algunas han decidido apostar por espacios más abiertos. El programa investiga en Punta Umbría, Huelva, como se han incumplido las normas debido a la afluencia masiva de las personas que tienen allí una segunda vivienda.
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