En la semana previa a la entrega de los Globos de Oro, la Asociación de Periodistas Extranjeros (HFPA) que vota a los candidatos fue duramente criticada tras revelarse que en esa organización, formada por casi cien personas, no hay ni una sola de raza negra. Son muchas las estrellas del cine y la televisión que han puesto el grito en el cielo durante estos días, así como diferentes representantes de todos los sectores de la industria del entretenimiento, pero seguramente la HFPA no esperaba recibir el mayor zasca de todos de parte de las anfitrionas de sus premios, Tina Fey y Amy Poehler.
En su monólogo de apertura, realizado a distancia porque una estaba en Los Ángeles y la otra en Nueva York, las cómicas echaron más leña al fuego de la polémica. «La HFPA está formada por unos 90 periodistas ‘no negros’ –arrancó Poehler–. Y decimos ‘unos 90’ porque un par de ellos son directamente fantasmas… Y también se rumorea que un miembro alemán es una salchicha».
Turno para Fey, que continuó confirmando el dato: «No hay miembros negros en la HFPA… Sabemos que vuestra oficina es el cuarto trasero de un McDonald’s francés, pero tenéis que cambiaros».
Hacia el final del monólogo, Poehler señaló que se habían «pasado por alto a un buen número de actores negros y de proyectos liderados por negros». Y Fey recordó a los espectadores que, aunque los premios son una institución frívola manipulada por Hollywood, es importante darles una perspectiva de inclusión, y animó a la HFPA a hacer cambios en ese sentido: «Incluso en las cosas más tontas, la inclusión es importante. No hay miembros negros en la Asociación de Periodistas Extranjeros, y eso es algo que tenéis que cambiar».
De esta manera, Fey y Poehler se han alineado con las denuncias públicas de Kerry Washington, JJ Abrams, Jurnee Smollett, Jennifer Aniston, Damon Lindelof, Alyssa Milano, Simon Pegg, Rashida Jones, Ellen Barkin o Shonda Rhimes, que han conseguido que el hashtag #TimesUpGlobes sea tendencia todos estos días.
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