Las actuaciones más sorprendentes del Jubileo de la reina Isabel

Era el momento más esperado de las celebraciones del Jubileo de Platino de la reina Isabel II y el concierto Platinum Party at the Palace no defraudó ni un solo segundo. En un espectacular escenario ubicado enfrente del palacio de Buckingham los artistas invitados hicieron las delicias de todos los que estuvieron presentes, tanto ciudadanos como familia real. Los duques de Cambridge fueron los que más aplausos recibieron a su llegada (junto a la príncipe George y la princesa Charlotte), mientras que los duques de Sussex prefirieron saltarse este evento.

Un concierto que comenzó con un vídeo en el que la reina Isabel II toma el té con el osito Paddington y la monarca termina revelando que en su inseparable bolso guarda siempre un bocadillo de mermelada. Un sketch que dio el pistoletazo de salida a una noche llena de música, pero también de mucha emoción.

Tras este vídeo, comenzaron a sonar los primeros acordes de la canción We will rock you de Queen, que fue interpretada por Adam Lambert junto al resto de integrantes de la mítica banda.

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Aunque el momento que puso la piel de gallina a todos los asistentes, sin lugar a dudas, fue cuando Elton John interpretó al piano la canción Your Song. Eso sí, el músico la interpretó desde el interior de Buckingham Palace y fue mostrada a los asistentes a través de unas pantallas y con un asombroso mapping que reflejaba la imagen de Elton en los muros del palacio de Buckingham.

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No fue el único mapping que se vio en una noche en la que esta técnica fue utilizada en numerosas ocasiones con un efecto realmente espectacular.

Por no hablar del guiño especial a los corgis, los perros preferidos de la reina Isabel II.

Diana Ross fue otra de las grandes artistas que pisó el escenario y lo hizo para cantar el himno Ain’t no mountain high enough.

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Rod Stewart dejó a todos sin palabras con sus saltos sobre el escenario demostrando que sigue estando en plena forma.

Los discursos del príncipe Carlos y del príncipe Guillermo fueron muy aplaudidos y la nota de humor la puso el hijo de la reina Isabel II cuando pidió al público que gritase para que su madre pudiese escucharlos ya que no podía estar con ellos en persona en una noche tan especial pero «el castillo de Windsor está bastante cerca». Además, no dudó en empezar sus palabras diciendo «Su majestad, mamá» y recordó que su madre estaba viendo el concierto «y espero que terminando su sándwich de mermelada». Una velada, sin duda, inolvidable.





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