El clamor en el Internet global es unánime: «¡Vera, cuéntamos cuál es el secreto de tu juventud!». La verdad es que a la mayoría nos parece inconcebible llegar a los 70 años con esta apariencia física, tan absolutamente juvenil. Vera Wang, la diseñadora de los vestidos de novia de un montón de famosas (de Victoria Beckham y Mariah Carey a Chelsea Clinton, Ivanka Trump o Lily Aldridge), ha aprovechado el confinamiento para subir un montón de selfies a su cuenta de Instagram en los que parece una adolescente de Calabasas más que una venerable anciana. Es obvio que echa mano de muchos trucos: se tapa estratégicamente la cara, uno de los lugares en los que la edad resulta más innegable, y echa mano de estilismos juveniles de última tendencia. También recurre a los inevitables filtros, claro, pero aún así su físico resulta asombroso. Excepcional.
Lo cierto es que Vera Wang es favorita de las famosas y mimada por la moda desde que era muy joven: fue la editora más joven de la historia de la edición estadounidense de «Vogue», una posición que ocupó durante 17 años. Dejó la revista en 1987 àra trabajar con Ralph Lauren, pero a los 40 decidió dedicarse a su sueño: diseñar vestidos de novia. A finales de los 90 y principios de los 2000 ya era una creadora de culto. De hecho, fue la encargada de crear los tres vestidos de la primera boda de Kim Kardashian, el de la boda de Khloé Kardashian, tiene todos los premios de la moda y ha seguido en la cresta de la ola hasta hoy. Su cuerpo refleja la importancia que posee el físico en la industria de la moda: se cuida y mima hasta la obsesión. Sin embargo, el increíble cuerpo de la diseñadora tiene otros motivos.
Además de una vida buena, en la que Vera Wang ha podido acceder a todos los cuidados disponibles, tenemos que tener en cuenta la increíble genética de la diseñadora, nacida en Nueva York pero de origen chino. Sin duda, se beneficia de una herencia genética privilegiada. Además, Wang practicó desde muy niña el patinaje artístico, hasta el punto de quedarse a las puertas de entrar en el equipo olímpico nacional. Sin duda, su amor por el deporte tiene también mucho que ver con esas increíbles abdominales de las que hoy presume.
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