Después del verano, llega la época de volver a empezar. Resetearte, deshacerte de los malos hábitos que has adquirido en verano (aka las siestas de tres horas y los helados) y adoptar una rutina de alimentación: es hora de ponerte a punto.
La alimentación es importantísima, de eso no hay duda. Pero entrenar a tu cerebro para que se deshaga de lo malo también está en tu mano. ¿Cómo? Introduciendo pequeñas pautas que sean fáciles de seguir y con las que te sientas mejor.
Adiós a las dietas milaagro
Siempre lo decimos: las dietas milagro no existen, es más, pueden ser incluso perjudiciales para el organismo. Será mucho más fácil decirle adiós a la comida basura si te pones metas realistas que no sena completamente restrictivas y con las que puedas disfrutar comiendo.
Incluye alimentos que te gusten
Cuando basas tu alimentación en las frutas, las verduras y las hortalizas que más te gustan, te sientes mejor. Comerás rico, los alimentos serán apetecibles y además, estarás diciendo adiós a aditivos y azúcares innecesarios que no te hacen ningún favor.
Ordena tu nevera
Lo más importante para seguir con la alimentación saludable es tener la nevera ordenada y sobre todo, llena. Si tienes la nevera y la despensa llena de alimentos saludables será más complicado pecar y te decantarás por alimentos saludables y nutritivos.
Di adiós a las cenas copiosas
Desayuno como un rey, almuerza como un príncpe y cena como un mendigo. La base es esa. Reduce las cantidades de los alimentos de tus cenas y hazlas ligeras.
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