Desde la década de los 60 hasta día de hoy han transcurrido, precisamente, la misma cifra de años. Cuando una joven Jane Birkin despuntó como uno de los mayores iconos de estilo de la época y se convirtió en musa indiscutible de moda, nadie jamás llegaría a imaginar que las lecciones de la actriz y cantante serían ahora mismo estamentos inmóviles de estilo.
Tan clásica como capaz de deslumbrar con un pantalón vaquero y un top monocolor, Birkin creó una corriente que grandes referentes actuales como Alexa Chung han sabido recoger y adaptar a los tiempos. Más allá de la admirada y copiada rebeldía de su flequillo y de emblemático bolso de Hermès que lleva su nombre por bandera, la pareja de Serge Gainsbourg dejó a cada paso una enseñanza.
Con él, precisamente, en París, nos mostró cómo una blusa blanca de escote Bardot calada y fluida, puede ser la protagonista de un estilismo y postularse como una de las prendas más necesarias de cualquier armario estival. Porque ella sabe a la perfección cómo convertir piezas básicas en objetos de deseo.
Esa blusa que lució en el año 1969 es además una de las más deseadas a día de hoy. Sus guiños románticos evocan a esa época bohemia en la que para aderezar un look no hacía falta más que escoger una prenda protagonista. Más allá de las tendencias, su legado se recuerda cada año y las firmas de moda le rinden, inconscientemente o no, homenaje lanzando a la venta diseños muy parecidos que ya la propia Alexa Chung nos ha enseñado también en su perfil de Instagram.
Atemporal y clásica, Birkin escogió para la ocasión esta blusa romántica, una pieza imprescindible de cualquier vestuario ya que resulta tan funcional como versátil.
La diseñadora e ‘it-girl‘ Alexa Chung siempre luce prendas sencillas que encajan, perfectamente, tanto en estilos más modernos como en los más tradicionales.
¡La quiero!
¡La quiero!
¡La quiero!
¡La quiero!
¡La quiero!
Fuente: Leer Artículo Completo