El compromiso de hacer de la moda un negocio más sostenible y menos contaminante no lo adquirieron únicamente las firmas de moda más conocidas. Marcas de ropa deportiva o especializada también están concienciados del problema que supone ser la segunda industria más contaminante del mundo, y muchas trabajan ya para prescindir de plásticos y otros materiales que hacen de sus creaciones un producto contaminante.
Una de las marcas más concienciadas con la necesidad de cambiar nuestros hábitos de fabricación y consumo es Reebok, que desde hace varias temporadas ha incorporado a su catálogo zapatillas con componentes sostenibles. Y ahora, en la misma semana que se celebra la Cumbre del Clima, anuncia que ya ha sido capaz de fabricar unas zapatillas de running completamente ecológicas, hechas con diferentes plantas.
Se trata de las Forever Floatride Grow, unas zapatillas en tonos beige y blancos que están hechas con aceite de ricino, eucalipto, algas y caucho natural. Con un diseño sencillo y elegante, esta nueva versión de las Reebok Floatride Energy consigue lo que ninguna de sus predecesoras. Que las zapatillas estén realizadas por completo con materiales sostenibles.
“Hemos reinventado nuestras zapatillas utilizando materiales naturales para crear la que consideramos ya la zapatilla con más rendimiento del mercado” señaló Matt O’Toole, presidente de la marca deportiva, en la presentación de las zapatillas. La entresuela de las Florever Floatride Grow está hecha con ricino, la plantilla con algas para eliminar los malos olores, la suela exterior con caucho natural y la parte superior y más visible con la base del árbol del eucalipto.
Reebok se comprometió a reducir el poliester de sus fabricaciones y a eliminarlo por completo antes de 2025. Por lo pronto, el año que viene ya podremos comprar sus zapatillas más ecológicas, ya que está previsto que salgan al mercado en otoño de 2020.
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