Que el armario de Carolina de Mónaco es uno de los más espectaculares del mundo es algo que sabemos. Que la princesa fue capaz de adelantarse a muchas de las tendencias que hoy vemos triunfar, tanto sobre las pasarelas como sobre el asfalto, también es un hecho innegable.
Lo que quizás no esperábamos, ni vimos venir, es que uno de sus tres looks de novia (se casó en tres ocasiones, en los años 1978, 1983 y 1999) volviera a tener relevancia este año. No hablamos del elegante traje de Chanel de su última boda, ni del refinado vestido de color champán en seda de su segundo matrimonio, sino del primer estilismo. El mismo es para muchos su más memorable look de novia y razones no faltan. Lo curioso, es que lo que de verdad es tendencia en materia de novias este 2022 no es el vestido de Dior con transparencias y bordados que Carolina de Mónaco lucía a comienzos de los años 70 (y en el que su hija, Carlota Casiraghi, se inspiraría para su propia boda años después), sino el original tocado que la princesa elegía para su enlace con Philippe Junot.
Carolina aparecía aquel soleado 29 de junio luciendo un original tocado compuesto por pequeñas flores blancas que daban un aire totalmente diferente al velo que lucía. Ahora, para sorpresa de todos, Chanel ha querido recuperar en su desfile de Alta Costura el detalle de los tocados con flores blancas para novias. La maison lo ha propuesto a modo de corona floral, con un lazo a cada lado de la cabeza, optando así por una novia de aire más desenfadado y algo más bohemia.
Curiosamente un lazo de seda protagonizó la diadema de la segunda boda de Carolina de Mónaco, así que la corona de Chanel parece una unión de ambos tocados de los looks de novia de la princesa.
Sin duda, aunque los tocados no sean exactamente iguales, mantienen el rasgo común de ese tipo de detalle floral muy concreto, así como los lazos. Teniendo en cuenta la relación de la casa real monegasca con Chanel o el hecho de que Carlota Casiraghi abriera el desfile protagonizando un increíble momento montando a caballo, no sería de sorprender que la inspiración detrás de la novia imaginada por Virginie Viard para esta colección de Alta Costura no haya sido otra que Carolina de Mónaco y sus dos primeros looks de novia.
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