Si hay alguien que nos ha dada una lección incontestable de cómo enfrentarse a la muerte de un ser querido con entereza, esa es Paz Padilla. La presentadora vivió la enfermedad de su marido, Antonio Juan Vidal, de la manera más discreta que le fue posible, sin contárselo siquiera a sus compañeros de ‘Sálvame’. Y, tras pasar el tiempo prudencial de luto, se sentó en el ‘Deluxe’ para hablar con sinceridad sobre lo complicados que habían sido esos meses, pero también el amor que le dejó su marido.
Antes de terminar este 2020 (en el que, por cierto, también perdía a su madre a principios del mismo), Paz quiere agradecer toda esa lluvia de cariño que ha recibido de sus seguidores. ¿Cómo? Ha organizado un sorteo en su cuenta de Instagram y cenará con el ganador del mismo para rematar el año con un buen sabor de boca.
«Quiero devolver el amor que he recibido«, se puede leer este miércoles en la portada de la revista ‘Semana’, donde ha hablado de ese arropo que ha sentido de cientos de personas anónimas que han sido claves para que la gaditana no se derrumbara tras esa pérdida y haya conseguido normalizar, en la medida de lo posible, su día a día tras ese mazazo.
«Este año quiero devolver todo el amor que a mí me han dado en estos últimos meses», explica antes de contar cómo participar en esa especie de concurso. Hay que colgar fotos o vídeos divertidos, etiquetados con el ‘hashtag’ 2Mdesonrisas. Una iniciativa con la que, además, pretende ayudar a todos los que están en una situación similar a la suya a arrancarles una sonrisa a través de personas que no conocen de nada.
Padilla, de quien se subrayó la enorme generosidad con la que sorprendió al abrirse de una manera tan desgarradora ante la audiencia de Telecinco en esa reaparición televisiva, sabe que no está sola. Por supuesto, su hija y su yerno han jugado un papel determinante. También sus compañeros de trabajo. Pero no quiere olvidarse de la solidaridad de los desconocidos. Y esa es, en parte, también su grandeza.
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