El secreto del maquillaje 'buena cara' de Michelle Pfeiffer

Es, junto con Kim Basinger y Sharon Stone, una de las actrices que fueron consideradas sex symbols en la década de los 90. Su belleza, pero sobre todo su talento, las llevaron a lo más alto de Hollywood y ahora las tres defienden su derecho a envejecer sin que la industria les de la espalda. A partir del movimiento #MeToo, la cima del séptimo arte comenzó a entender que si los hombres pueden enfrentarse al paso del tiempo y no perder su credibilidad laboral, las actrices también.

De ahí que Michelle Pfeiffer se muestra de lo más natural, tanto a nivel profesional como a nivel personal, cuando se enfrenta a las ruedas de prensa que está ofreciendo como parte de su último y femenino proyecto, The First Lady.

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El secreto de un maquillaje ganador a partir de los 60

Que Michelle Pfeiffer está radiante es algo que ya sabemos. Sin embargo, la actriz ha abrazo un maquillaje que es ideal cuando se ha superado la barrera de los 60. En esta etapa de la vida, lo mejor es optar por maquillajes en tonos rosados o melocotón. Que sean suaves y brillantes, pero sin ese punto más ‘agresivo’ que podrían dar tonalidades más en tonos tierra o marrones más potentes.

La clave es centrar el foco del maquillaje en los pómulos y los ojos para dar sensación de amplitud. En cuanto a las sombras, te proponemos tonos rosados con un punto blanco para, como te decimos, ampliar la zona de los ojos. Con el envejecimiento de la piel, las arrugas en el contorno de los mismo se abren paso y esta es la manera de difuminarlas lo máximo posible.

Labios brillantes en tonos claros

De nuevo, Michelle ha escogido para presumir de labios jugosos un color que juega con el rosa, el marrón e incluso con un toque anaranjado. El paso del tiempo puede que haya hecho que nuestros labios se hayan afinado y la mezcla de estos tres colores es la mejor opción para ofrecerles ese potencial extra que no conseguiríamos con tonalidades más fuertes como los rojos pasión o los burdeos. La clave está en ir suavizando el maquillaje conforme los años van pasando. Una técnica infalible.




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