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Nuevo gran protagonista del corazón, esto es un no acabar. Siempre estamos empezando, estrenando caras, poses y comportamientos. Ya llovió mucho desde que el gran Camilo Blanes llegara a nuestras vidas divirtiendo, interesando u ocupando portadas. Y en ellas sigue más o menos alternativo, con impacto de va y viene, su hijo Camilín, de 38 años, que se ha convertido en un valor de actualidad, aunque con muchas subidas y bajadas, apariciones y pérdidas. El ahora reaparecido Camilo Blanes, único y reconocido hijo del desaparecido Camilo Sesto y Lourdes Ornelas, una pareja que en tiempos fue fundamental en la vida musiquera del país, ha aceptado, in extremis, ser ayudado en el control descontrolado de sus finanzas. De momento ya tiene para seguir tirando unos años, recrear curiosidad y darnos la tabarra. Así son los personajes del corazón. Llegan para hacerse con nosotros y nunca dejarnos solos, ojalá fuera lo contrario, pero nunca se da el caso. Fueron estrictos y concretos dando el mensaje, aunque siempre haya que leer entre líneas, y ni exagerarlo o sacarlo de contexto.
Ahora, Camilín intenta ser un objetivo mediático, mostrándose centrado y estable, ojalá lo consiga aunque no lo tiene fácil, porque hay cosas en la vida que no tienen marcha atrás, aunque muchos crean lo contrario. Recuperar a Camilo a través de Camilín es como una cura de rejuvenecimiento, aunque con sus correspondientes cicatrices, no vayan a creerse lo contrario porque no hay manera de evitarlo. Es una manera nada difícil y cómoda de hacernos sentir más jóvenes, aun sin serlo. Una fantasía para tener la sensación emocional de sentirse más cómodos, relajarse y disfrutar con menos cicatrices o arrugas. Es como si fuera una especie de elixir de juventud, porque no se conforma quien no quiere. Ya ven que resulta sencillo, aunque no sea real.
Un hijo en común
Lourdes Ornelas tenía sólo diecisiete años cuando conoció a Camilo Sesto, de veintinueve, en México, en 1973. Diez años después llegaba al mundo Camilín, en México, el 24 de noviembre de 1983.
Una joven promesa
Lo intentó pero no lo consiguió. Hizo amago de seguir los pasos musicales de su padre, el gran Camilo. Pero quedó en eso. Amago. Camilín abandonó el proyecto de ser cantante y se rodeó de gente poco recomendable en México.
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