Casi dos semanas después de conocerse que Alejandro Sanz y Raquel Perera habían recapacitado y enterrado el hacha de guerra en su proceso de divorcio, aún van saliendo a la luz detalles y condiciones de ese acuerdo al que habría llegado el ya exmatrimonio con el beneficio de sus hijos como gran protagonista de esa llegada a un punto común razonable.
Este miércoles, es la revista ‘Semana’ quien desgrana los detalles más suculentos de ese convenio que ambos han firmado y que, ya se conocía, incluía que Raquel dejara su vida en Miami para regresar a España y que los niños estén cerca de su padre. Unos niños por los que el cantante pagará a su ex una manutención mensual de 10.000 euros (5.000 por cada uno de ellos). Un dinero que irá disminuyendo a medida que vayan pasando los años.
Dentro de ese convenio que desmenuza la mencionada publicación, también se puede leer que será Alejandro quien se hará cargo del pago de la casa en la que vivirá la madre de sus hijos junto a estos. Una vivienda muy cerca a la suya, en la exclusiva urbanización de La Finca, en Madrid. Es en esa zona donde Raquel deberá buscar el lugar en el que asentarse.
Por si fuera poco, Sanz se hará cargo también de los gastos médicos y escolares de los menores, así como del sueldo de la empleada de hogar que se encargue de la limpieza y ayude en el cuidado de los pequeños. Una mujer que ha acompañado a la familia desde que nacieron los niños y de la que no van a desprenderse aún cambiando de manera radical su vida.
Poco más de un año después de que la revista ‘Hoy Corazón’ informara, en exclusiva, de que su relación no atravesaba su mejor momento (y de que, días más tarde, mostrara las primeras fotos de él junto a Rachel Valdés), se pone punto y final a esta historia que lo que de amor en el pasado.
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