Hace unos meses, David Schulte, hasta ese momento presidente de la marca de ropa The Row (propiedad de las hermanas Olsen), salía de manera abrupta de la sociedad. Sin dar mayores explicaciones, se marchaba y dejaba a las gemelas compuestas y sin cabeza visible al mando del negocio.
Ahora, tenemos noticias de David y de ese punto y final a su relación con las gemelas y la marca. Este ha interpuesto una demanda contra ellas, The Row y Dualstar Entertainment, la compañía dentro de la que se encuentra la marca. Eso sí, fiel a la discreción con las que cogió sus cosas y se marchó, se desconoce el motivo que le ha llevado a emprender las acciones legales, así como la cuantía económica que les pediría a cada una de las partes.
Los medios norteamericanos ya han comenzado a especular sobre el asunto, y todo apunta a que Schulte podría tener información en su poder, recabada durante los tres años que formó parte de la empresa, que podría poner en jaque a aquellas niñas que saltaron a la fama gracias a su labor interpretativa.
Ashley y Mary-Kate ya tuvieron que hacer frente a un problema judicial relacionado con su actividad empresarial en 2015. En aquella ocasión, fueron sus becarios quienes interpusieron medidas legales por la situación irregular en la que les tendrían trabajando. Tras cinco años de plácida tranquilidad, tendrán que regresar a contestar a las preguntas que les plantee un juez.
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