Practicas ejercicio regularmente porque te gusta estar sana y fuerte y haces especial hincapié en los ejercicios para tonificar las piernas y los glúteos. Mantienes la grasa a raya, pero no así la celulitis que se resiste a desaparecer por mucho que entrenes. Paz Torralba, directora de The Beauty Concept, lo explica: “La celulitis es un acúmulo de adipocitos inflados prisioneros en una red de fibras rígidas que alteran la función de los vasos sanguíneos provocando la retención de líquidos y una mala eliminación de toxinas, dando lugar a la conocida piel de naranja”.
Tampoco te desharás de ella adelgazando; puedes reducir contorno, pero la piel de naranja seguirá ahí. Lo único capaz de hacerla desaparecer es la combinación de una dieta adecuada, deporte y cosmética anticelulítica. En este sentido, “la piel debe estar preparada para que los cosméticos actúen con efectividad. Por eso recomiendo utilizar un guante de crin en seco cada mañana, exfoliar la piel una vez por semana, darte duchas de agua fría, realizarte masajes manuales con los productos adecuados y con ayuda de accesorios específicos como un buen guante de silicona”, aconseja Torralba.
La alimentación es tu otra baza para acabar con la celulitis. Seguro que ya te repites como un mantra eso de que debes beber agua con frecuencia; aún más si tu objetivo es eliminar la piel de naranja: “El agua es clave para evitar la retención de líquidos que puede ocasionar problemas vasculares y ser causa de la celulitis. El agua elimina toxinas, y es recomendable que sea baja en sodio (menos de 20 mg/litro de agua)”, explica Biri Murias, directora de los centros de belleza que llevan su nombre. En este sentido, Paz Torralba recomienda también beber "infusiones diuréticas como el té verde, diente de león y romero".
¿Y qué alimentos no deben faltar en tu dieta? Verduras, comida rica en fibra y legumbres. Las primeras son ricas en potasio, agua y bajas en sodio. “Espárragos, calabacín, apio y alcachofas fortalecen nuestros capilares y favorecen la diuresis, y la cebolla activa nuestra circulación y reduce los niveles de azúcar en sangre”, explica Biri Murias. La fibra favorece la absorción de los nutrientes, “vitaminas y minerales que hacen que tu piel esté hidratada”. Por último, las legumbres poseen proteínas que ayudan a construir músculo en lugar de grasa. “*La proteína del huevo, por ejemplo, es baja en calorías y grasa*”, apostilla Murias**.
Y una recomendación extra: la fruta, mejor por la mañana. “Soy partidaria de tomar un desayuno equilibrado y variado, tomando frutas por piezas y no en zumo”, concluye la experta.
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