Pasadas las fiestas navideñas perder peso se vuelve una prioridad para muchas personas y puede convertirse en una dañina obsesión. Para mantener alta tu autoestima y adelgazar de forma saludable la clave está en comer de forma consciente y desde el autocuidado.
Di sí a las grasas saludables
Aunque llevamos décadas con el bombardeo de que las grasas no son buenas para una dieta de adelgazamiento, esta afirmación ha cambiado hace relativamente poco tiempo cuando se ha descubierto que realmente las grasas saludables son indispensables para mantener una dieta saludable y para perder peso.
Cuando hablamos de grasas buenas nos referimos a alimentos beneficiosos para el organismo cargados de antioxidantes como son los aguacates, el aceite de oliva, el aceite de coco, las semillas de lino, las aceitunas, el pescado azul o los frutos secos. Estos alimentos son altamente saciantes y evitan la acumulación de grasa que se produce cuando el cuerpo segrega un exceso de insulina ante un pico de glucosa.
Las grasas trans por su parte son más difíciles de metabolizar y ponen en riesgo la salud, véase bollería industrial, patatas fritas, margarinas, pizzas envasadas… cuidado con ellas y con el azúcar y los carbohidratos simples porque suelen generar un círculo vicioso ya que provocan un aumento de azúcar en sangre muy rápido y que cae igual de rápido trayendo consigo cansancio, fatiga y muchas ganas de volver a comer este tipo de alimentos. Algo que se puede evitar incluyendo en tu dieta grasas saludables. ¡Sé consciente de con qué te alimentas!
Ojo con los edulcorantes
Está muy extendido entre la población que no quiere engordar, que quiere cuidarse más o adelgazar, optar por edulcorantes en lugar de azúcar para endulzar el café, infusiones, smoothies, postres… pero ten en cuenta que estos edulcorantes sintéticos pueden tener un efecto nocivo para la salud, sobre todo si existe un exceso de consumo de los mismos.
Los edulcorantes artificiales aumentan la absorción de glucosa que procede de los alimentos que consumes (nunca lo habrías imaginado, ¿verdad?) alterando tu flora intestinal o microbiota y poniendo en riesgo la salud y siendo más proclive el organismo a sufrir enfermedades y a ganar peso. Elige siempre que puedas endulzantes naturales como la miel o prueba a endulzar con dátiles o plátano, es un truco fabuloso y santísimo para endulzarte la vida.
Realfooding no es una moda más
Evitar la comida envasada y los ultraprocesados no solo va a mejorar tu salud, también va a ayudarte a controlar el peso. Tan solo con eliminar de tu dieta este tipo de alimentos y basando tu alimentación en comida real vas a perder peso casi sin darte cuenta, comiendo buenas cantidades de comida, sin pasar ni gota de hambre y manteniendo una buenísima salud.
Smoothies verdes, mucha verdura, fruta, carne, pescado, huevos, frutos secos, legumbres, semillas… llena tu nevera y tu despensa de comida saludable y real, nada de envasados. La fruta mejor no en zumos sino por piezas o triturada en batidos para no desaprovechar la fibra que tienen que es muy vaciante y te va a ayudar a eliminar toxinas.
Cuida tu microbiota
El estado de tu microbiota o flora bacteriana intestinal influye en tu peso y en la cantidad de grasa de tu cuerpo. Si tu microbiota se daña puedes comenzar a acumular grasa y a aumentar de talla así que, además de para mantener tu organismo saludable, deberías prestarle mucha atención al estado de tu intestino.
La comida basura, el azúcar o los ultraprocesados son nefastos para mantener la microbiota sana así que nuestra recomendación es que consumas alimentos probióticos naturales como el kéfir, la kombucha, el chucrut o el kimchi, alimentos que van a reforzar tu flora intestinal y con ella tu salud en general mejorando tu línea en particular.
Mantente en el momento presente
No, no estamos hablando de viajes en el tiempo pero sí de que deberías centrarte en lo que haces y cómo lo haces sobre todo en las horas de las comidas. Comer viendo la televisión o dando un paseo por Instagram va a hacer que comas sin darte cuenta y muy rápido.
Comer de manera pausada masticando mucho los alimentos va a suponer primero que tu digestión sea más fácil de hacer y logres una mejor absorción de nutrientes, segundo que te centres en el aquí y el ahora con el mindful eating y tercero que quemes más calorías y te sacies antes, ya que el cerebro comienza a enviar el mensaje de saciedad 20 minutos después de empezar a comer. Comer despacio puede ser entonces un ejercicio de relajación y una manera de hacer que pierdas peso fácilmente.
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