La Reina ha vuelto. Después de meses de hastío ‘sartorial’ y aburridos looks que nos hacían pensar que siempre vestía igual, doña Letizia confirma con un look impecable en su visita al Museo de Arte Contemporáneo de la Fundación Helga de Alvear, en Cáceres, que con la primavera en el horizonte próximo ha recuperado su mejor versión de estilo. Y ya da igual que estrene ropa (como este maravilloso vestido de Massimo Dutti) o tire de fondo de armario (como es el caso hoy), sus últimos aciertos encadenados hacen presagiar que, por fin, se acabaron los días grises.
Desde que comenzó el año hemos ido viendo un progresivo cambio de estrategia ‘sartorial’ en la Reina. Poco a poco ha ido incorporando nuevas prendas en su armario, después de meses repitiendo look, y para sus apariciones públicas y reuniones de trabajo ha ido cambiando aburridos looks ‘working girl’ de inspiración masculina que parecían siempre iguales (¡con lo bien que sabe manejar ella este registro!) por estilismos mucho más sofisticados. Esta vez, además de muy favorecida, con otro detalle: su reconciliación con Felipe Varela.
Para este viaje express a Cáceres la Reina ha recuperado un maravilloso vestido de tweed blanco con hilo de plata de Felipe Varela que estrenó en noviembre de 2017 para asistir a los Premios Jaume I en Valencia y que volvió a lucir en la primavera de 2018 para recibir en Madrid al presidente de Colombia y a la Primera Dama. De marcada inspiración Chanel, en su día se comentó mucho el sospechoso parecido del diseño de la Reina con el que había lucido meses antes, firmado este sí por la maison, Nicole Kidman en el almuerzo de los nominados a los Oscar.
Copia de Chanel o salido directamente del imaginario del que un día fuera diseñador de cabecera de la Reina, doña Letizia lo ha combinado con sus salones negros de tacón altísimo de Manolo Blahnik, un bolso de mano de inspiración retro de Nina Ricci y le ha vuelto a añadir un fino cinturón negro superpuesto, demostrado que su Varela entalladísimo le sienta igual de bien ahora que hace cuatro años.
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